Si en los meses de mayo o junio ojeamos las páginas deportivas de cualquier periódico, puede darnos la impresión de que los periodistas acaban de conseguir superar un Master en Matemáticas. En todos los titulares vemos hablar de matemáticas: tantos por ciento, recuentos, probabilidades, y multitud de cálculos para ver si tal o cual equipo tiene posibilidades de quedar campeón de liga o, lo que suele ser más agónico, subir o bajar de categoría.
Como era de suponer, un mundial de futbol no puede por menos que generar cantidad de matemáticas para ver las distintas posibilidades que ofrecen los resultados según los partidos que falten. Si, por ejemplo, en este momento Eslovaquia tiene 4 puntos, Inglaterra y Estados Unidos 2 y Argelia 1 sólo, todos los periodistas deportivos se lanzan como locos a estudiar todas las posibilidades para ver quien se puede clasificar. Los resultados no siempre son los previstos, porque aparte de que los equipos van a su bola, nunca mejor dicho, de todos es conocido el anumerismo radical que impera dentro de la profesión periodistica.
Por si queréis ver como grandes empresas, como J.P. Morgan, hacen estudios para ver cuáles son las selecciones candidatas a ganar el mundial podéis consultar el siguiente
artículo de un peridista mexicano en donde habla de los procesos que siguen esas empresas para hacer sus prediciones.
Podemos además comprobar lo "científico" del resultado pues, como el artículo es anterior al comienzo del mundial, las previsiones de una de las empresas era de que México ganaba a Sudafrica y perdía con Francia. Real como la vida misma.
En este segundo enlace encontrarás la noticia de que investigadores americanos han encontrado un algoritmo para medir la calidad de un equipo en un partido de futbol. Puedes leerlo desde
aquí.
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